Mundo de buitres

Este mundo de buitres que nos bordea, está lleno de «locos» de inframundo. Que nos perdonen los locos, que de otros locos estamos hablando, de aquellos que se finjen de locos, pero que de locos nada tienen. Todos tenemos que hacer malabarismos. Al final, somos tratados como unos verdaderos payasos. Los poderosos se ríen de los menos favorecidos, pero la implacable muerte acaba riéndose de ellos, también. Al final de cuentas: todos somos unos payasos ante la muerte, que se ríe de nosotros a carcajadas, como buitre al acecho de su débil presa.

Están aquellos que nada bueno nos desean, cuando están ante el éxito de nuestros pasos. Solo nos culebrean el fracaso: «Desiste. Tú nunca lo vas a conseguir». «Eres un fracaso». Pero, cuando vencemos, se nos aproximan con envidia y nos «bablean»: «¡Ah!¡Ya ni te acuerdas de tus amigos!» 

¡Amigos ni que nada! «De esos amigos, que me cuide Dios, porque de mis enemigos, me cuido yo».

Imagen

Su comentario